Las ventas online crecen a pasos de gigante. El año 2018 las ventas en Internet eran un 20% del total, casi el doble del 11% que suponían el 2015. Si bien estos datos son prometedores para los negocios en línea, muchas tiendas tradicionales las consideran preocupantes; cada cliente que compra por internet no está comprando en las tiendas a pie de calle.

 

Consideramos que, para los propietarios de negocios tradicionales, tratar a los eCommerce como enemigos sería un error. Más bien se tendrían que considerar como nuevos aliados que llevan consigo nuevas oportunidades.

 

Los pequeños comercios locales siempre han tenido competencia, esto no es nuevo de este siglo. Los grandes centros comerciales ya hace décadas que amenazan con llevarse a los clientes de las pequeñas tiendas de barrio. Es precisamente la llegada de esta tendencia de la compra online que da a estos pequeños comercios la posibilidad de competir con las grandes superficies.

 

¿Cuáles son los beneficios que aporta una tienda digital si ya tenemos una tienda física?

 

  • Gastos reducidos: Los gastos de una tienda online son mínimos comparados con los que tienen que soportar los comercios offline. Esto lo convierte en una apuesta de poco riesgo y mucho beneficio para los negocios que se atrevan a dar el paso hacia la digitalización para complementar su negocio.

 

  • Alcance internacional: Una tienda de barrio es, por definición, de ámbito local. Los clientes potenciales están limitados por el número de personas que pasan cada día por delante de la tienda. Con la creación de una página web para poder vender en línea, tenemos la posibilidad de ampliar este alcance local hasta uno de internacional y ganar así miles de posibles compradores.

 

  • Presencia omnicanal: Una página web y presencia en las principales redes sociales nos permitirá estar en contacto constante con los clientes y conocer mejor sus necesidades y tendencias de compra.

 

  • Refuerzo a la tienda física: Disponer de una tienda web facilitará el proceso de compra a los clientes habituales que ya conocen los productos pero no pueden pasarse por la tienda. También servirá para aprovecharse de la tendencia de los clientes que primero investigan por la red y después compran en la tienda física. Esta tendencia es conocida como ROPO (Research Online Purchase Offline).

 

En cuanto a las desventajas de tener presencia con una tienda online, solo  podemos pensar en dos: el tiempo que se tiene que dedicar para montarla y el conocimiento que se tiene que tener para poderlo hacer.

 

Aun así, hay que decir que estas desventajas existen solo en el inicio. Una vez tenemos la web preparada, el tiempo que se  tiene que invertir se reduce considerablemente. Además, existe la opción de encargar la creación de la página web a expertos; por ejemplo, desde Efimàtica te asesoraremos, pondremos en marcha tu web y la dejaremos a punto para empezar a generar ventas.

 

En definitiva, la tendencia hacia la digitalización es un hecho. Es por eso que en vez de tratar a la nueva plataforma como un enemigo, os recomendamos que aprovechéis todas las ventajas y oportunidades que vienen con este canal en expansión.